Carmen Posadas y Marta Robles, Navidad en TCN

La diseñadora Toton Comella se alía cada Navidad con la editorial Planeta para presentar en su tienda de la calle Mestre Nicolau alguna novedad con un toque de estilo. De Mónica Carrillo a Ángel Llatzer, ya son muchos los nombres que han promocionado su obra en las citas festivas entre amigos y periodistas que organiza con cariño y eficiencia la estupenda Evelyn Fernández. Este año las elegidas han sido dos amigas, Carmen Posadas y Marta Robles, que aceptaron la invitación encantadas porque las dos son fans de TCN. Llegaron vestidas por la casa, pero ninguna con el aire descuidadamente informal que emanan las prendas de Toton Comella en la pasarela. Carmen las dota de glamur, enjoyándolas, y Marta las lleva a su terreno, urbano-chic con stilettos.

Les sobra elegancia, y quizá por ello se han lanzado a escribir un manual de buenas maneras, «las reglas no escritas del saber estar», que, curiosamente, nos llega en un momento en que parece que el buen estilo ha dejado de tener importancia. Se grita en política, en televisión… «Las malas maneras son muy habituales en determinados programas horrendos de televisión que ve muchísima gente porque gusta mucho la pelea, el morbo… pero en la vida real esa forma de comportarse no funciona para nada, es mucho más efectivo ser amable con los demás, sonreir…todo eso hace la convivencia más llevadera», me cuenta Carmen Posadas.

La escritora tiene muy claro que somos la imagen que damos, ya sea por nuestros gestos, ropa o lenguaje, y así seremos catalogados por los demás.  «La elegancia es muy importante en el día a día porque es no dañar a los demás, hacer la vida más agradable a los otros, ser generosos…», corrobora Marta.  No puedo evitar preguntar a Carmen por las axilas sudorosas de Pablo Iglesias en el debate a cuatro de Atresmedia («tu postura política no debe estar reñida con el respeto a los demás», dice) y por el jersey con la leyenda ‘Merde’ que lució Alicia Giménez Bartlett para recoger el premio Planeta: «Yo nunca me lo hubiera puesto pero hay gente más atrevida, más extravagante, y dentro de ciertos límites, si a ti te queda bien, se puede hacer. Yo nunca digo tacos, pero hay personas que sí lo hacen y no les queda tan mal».

Carmen empezó en la literatura «cuando la imagen de una escritora era la de Carmen Martín Gaite, y ser distinta te quitaba credibilidad, pero hoy en día ya tenemos hasta escritoras punkies«.  Hija de diplomático, está más que acostumbrada a recorrer mundo, y sabe muy bien que las diferencias culturales a veces son un gran problema. «En Japón, por ejemplo, me pasó que estando embarazada nadie me cedió un asiento cuando viajaba en tren. Ese trato a la mujer no me gusta nada. Pero tienen otras cosas magníficas. De cada cultura nos hemos de quedar con lo mejor».

Ellas lo han hecho en su libro, que está escrito inspirándose en la biblia británica de las buenas maneras, el Debrett’s (se habla desde como dar el pésame a poner la mesa). Cuentan que lo han actualizado, hasta aparece la selva de Internet. «No solo damos consejos prácticos sino que también hablamos de sociología, literatura, Historia…» O sea que podemos saber el origen de expresiones como «buen provecho» cuando no resulta nada fino. «Es herencia del mundo árabe, donde el eructo no está mal visto, y en según que contexto, por ejemplo en un ámbito rural, puede ser correcto».

Para estas fiestas, y todas en general, el libro nos da consejos prácticos para recibir en casa. Os cuento algunos:

–Si eres el anfitrión de una comida o una cena has de saber que una cosa es cebar a los invitados, y otra agasajarlos.

 –Si tienes más invitados que sillas de comedor, opta por el buffet, y si son muy numerosos por un còctel-cena de pie con platitos.

–El menú ha de ser equilibrado sin repteición de sabores y con platos sencillos.

— Si no tienes vajillas completas, mezcla elementos diversos con buen gusto y quedarás bien.

–El pan solo está en la mesa en los platos destinados a tal fin.

–La botella de vino nunca debe estar sobre la mesa.

–Si tienes un invitado ‘mudo’ es conveniente sentarlo junto a alguien de buen corazón, y si es un pesado que no para de cotillear, la solución puede ser llevar la conversación hacia un cotilleo ilustrado, por ejemplo, la última y escandalosa película de moda.

«Está Navidad la pasaré con mis nietos, ellos me han devuelto la alegria de disfrutar de estas fiestas», cuenta Carmen Posadas que ya tiene cinco en total, de sus dos hijas. Los más pequeños són mellizos y pelirrojos, «guapísimos», dice orgullosa.

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